Londres, una metrópoli conocida por su rica historia y vibrante vida urbana, es también el hogar de una gran población de zorros urbanos. Y el pasado domingo 21 de abril el equipo de la revista Jara y Sedal pudo comprobarlo cuando capturó las imágenes de un raposo gravemente afectado por sarna en las puertas del Museo de Historia Natural de Londres.
El vídeo, que muestra al zorro luchando contra los efectos de la enfermedad, ha llamado la atención sobre la situación de los zorros en Londres y la prevalencia de la sarna, una enfermedad que puede tener consecuencias devastadoras para los mamíferos afectados. El London Wildlife Trust estima que actualmente hay unos 10.000 zorros viviendo entre las calles londinenses, una cifra que refleja la adaptabilidad y resiliencia de estos animales en un entorno urbano.
La sarna sarcóptica, la enfermedad que afecta al zorro en el vídeo, es causada por un ácaro diminuto llamado Sarcoptes scabiei. Este parásito se aloja en la piel de su hospedador y crea galerías donde deposita sus huevos, causando un intenso picor e inflamación. La enfermedad no solo es un problema para los zorros, sino que también puede transmitirse a otros animales y, en raras ocasiones, a los humanos.
Una enfermedad muy avanzada
El zorro filmado por Jara y Sedal muestra signos claros de una infección avanzada: pérdida de pelo, piel engrosada y costras, síntomas típicos de la sarna. Estos síntomas no solo causan malestar físico, sino que también pueden llevar a la desnutrición y la hipotermia, ya que el pelaje de un zorro es esencial para su supervivencia en el clima a menudo frío de Londres.
El problema de la sarna en los zorros no es exclusivo de esta ciudad; es una preocupación en muchas partes del mundo donde los zorros viven en proximidad con humanos y otros animales domésticos. La enfermedad puede diezmar rápidamente las poblaciones de zorros, y brotes severos han sido documentados en varios países, como el nuestro.
La grabación del zorro afectado por sarna subraya la necesidad de una gestión, vigilancia y monitoreo de estos animales para prevenir la propagación de enfermedades y proteger tanto a otras especies como a las comunidades humanas.