La Fundación Artemisan celebró el pasado miércoles en Madrid su gala anual haciendo repaso a todos los proyectos de investigación, defensa jurídica y comunicación que ha realizado en favor de la caza a lo largo del último año.
12/4/2019 | Redacción JyS
La Fundación Artemisan presentaba anteayer en Madrid su ‘Anuario 2018’, un amplio informe en el que analiza el trabajo realizado por la entidad durante el último año, así como los principales proyectos que se van a desarrollar a lo largo de este 2019.
La presentación tuvo lugar durante la celebración de una Gala celebrada en la sede del centro asesor Abante y a la que asistieron los benefactores de Artemisan, así como representantes de entidades representativas del mundo rural y también del sector cinegético.
En el encuentro intervinieron los responsables de los diferentes departamentos de la Fundación, que presentaron los resultados obtenidos en cada uno de ellos. En este sentido, todos ellos destacaron el trabajo que se desarrolla, siempre con un carácter transversal. Desde los triunfos judiciales en temas como el plan del lobo de Asturias al lanzamiento de nuevos proyectos de investigación como Mixolepus y PIRTE, pasando por el informe de impacto socioeconómico de la caza y por el desarrollo de una estrategia de comunicación diferenciada dentro del sector.
De cara al futuro, el objetivo es consolidar todo lo conseguido en los dos primeros años de vida de la entidad, así como iniciar nuevos caminos, entre los que destaca la colaboración que se ha iniciado con la Fundación Atapuerca y que se plasmará en acciones concretas a lo largo de los próximos meses.
Por su parte, el presidente de la Fundación Artemisan, José Luis López-Schümmer, agradeció el respaldo de patronos, benefactores, entidades asociadas y empresas que han apoyado el proyecto a lo largo de estos dos años de actividad. Asimismo, reivindicó la importancia de transmitir que la actividad cinegética sigue siendo imprescindible, además de legítima, también en el siglo XXI. Y es que su papel necesario en la conservación de los ecosistemas y de las especies silvestres, su impacto positivo sobre la socioeconomía del mundo rural y su carácter tradicional y hacen de la caza una actividad vital de cara al futuro.
En el evento también intervinieron el presidente de Abante, Santiago Satrústegui, y otros representantes del mundo rural, como Pedro Barato, presidente de Asaja Nacional y de la Alianza Rural, y Carlos Núñez, presidente de la Unión de Criadores del Toro de Lidia. Por parte de la Administración participaron el director general de Sanidad e Higiene Animal y Trazabilidad, Valentín Almansa, y José Manuel Jaquotot, subdirector general de Política Forestal de la Dirección General de Desarrollo Rural, Innovación y Política Forestal ambos del Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación.
Entre otras cosas, todos ellos destacaron la importancia de la aparición de una entidad como la Fundación Artemisan, que viene a complementar lo que ya existía dentro del sector cinegético. «Si no existiera Artemisan, tendríamos que inventarla», llegó a afirmar Valentín Almansa. Y es que algunos de los grandes retos del mundo de la caza de cara al futuro pasan por hacer llegar la realidad de la caza a los más jóvenes para poder garantizar el relevo generacional, y por conseguir que sea un sector capaz de generar «una mochila de ciencia y de datos» con los que demostrar el carácter esencial de la actividad.
Puedes descargar el ‘Anuario 2018’ pinchando sobre la siguiente imagen:
