Ubicada a tan solo media hora de Ciudad Real capital, una finca cinegética de 570 hectáreas se ha puesto a la venta recientemente. Se trata de un enclave privilegiado que combina la cercanía a la ciudad con la absoluta privacidad, al no contar con caminos vecinales ni servidumbres que lo atraviesen. Su acceso directo por carretera asfaltada refuerza la comodidad de este singular espacio, considerado un auténtico santuario de fauna silvestre.
Más allá de su localización, la propiedad destaca por su orientación claramente cinegética. Los amantes del campo y la naturaleza pueden encontrar aquí un terreno ideal para el disfrute de monterías de ciervos y jabalíes, además de recechos de corzos y jornadas de menor con perdices y conejos. Todo ello en un ecosistema cuidado, con labores agrícolas destinadas a favorecer la alimentación y atracción de las especies.
Infraestructuras pensadas para la caza
La finca está equipada con instalaciones específicas para optimizar cada jornada en el campo. Dispone de un pabellón de cazadores diseñado para el descanso y la convivencia al acabar cada jornada cinegética, así como de varias torretas de espera y comederos repartidos estratégicamente por la propiedad. A esto se suma la siembra dedicada a la fauna, que garantiza la sostenibilidad del entorno y la abundancia de especies.
La explotación combina la tradición agrícola con su vocación cinegética. Cuenta con unos 500 olivos en producción, lo que supone un complemento de ingresos para el propietario. Además, dispone de abundante agua, gracias a un pantano propio y varias charcas que aseguran el suministro para la fauna y la vegetación, creando un ecosistema diverso y autosuficiente.
Exclusividad y valor añadido
Uno de los puntos fuertes de esta finca es su privacidad absoluta. Al no tener enclaves ni caminos públicos, ofrece un control total sobre la propiedad, un aspecto muy valorado en este tipo de activos. A ello se suma que la finca está completamente electrificada, lo que permite cualquier desarrollo o adaptación de sus instalaciones.
Los agentes encargados de la operación destacan que esta propiedad representa «una oportunidad única para quienes buscan combinar la pasión cinegética con una inversión sólida en recursos agrícolas y naturales». La finca reúne todos los requisitos de accesibilidad, dotación e independencia que la convierten en una de las ofertas más atractivas actualmente en el mercado rural manchego.
Una inversión de futuro
Situada en Alcolea de Calatrava, esta finca no solo es un enclave para disfrutar del campo y la caza, sino que también constituye un activo estratégico para quienes quieran diversificar su inversión en tierras, recursos naturales y aprovechamientos agrícolas. La combinación de exclusividad, naturaleza y rentabilidad refuerza su atractivo en un momento en que la demanda de este tipo de fincas singulares no deja de crecer.
Para contactar y obtener más información puedes acceder al anuncio original a través de este enlace.