Icono del sitio Revista Jara y Sedal

El terrorífico sistema que utilizan para combatir las plagas de conejos en sus madrigueras usando gas

Un hombre muestra cómo funciona el sistema.

Un vídeo subido a redes sociales ha vuelto a poner sobre la mesa los métodos utilizados en todo el mundo para combatir las plagas de conejos silvestres. Bajo el título ‘Cómo encontrar a un conejo en su madriguera’, la grabación muestra a un hombre empleando un sistema que combina la inyección de gas inflamable con una detonación controlada en el interior del vivar. Las imágenes, que ya suman más de dos millones de reproducciones, no han dejado indiferente a nadie.

En el vídeo, el operario explica paso a paso cómo se introduce el gas por una abertura de la madriguera utilizando una lanza metálica conectada a un depósito. Después de unos segundos, acciona un mando que genera una chispa y provoca la explosión bajo tierra. La onda expansiva hace saltar la tierra en la superficie, certificando la eficacia del sistema.

La claridad con la que el protagonista describe el proceso y la contundencia visual del resultado han convertido el vídeo en un fenómeno viral, sobre todo entre quienes se dedican a la gestión de fauna silvestre o sufren los daños agrícolas provocados por esta especie.

Una técnica que también se ha utilizado en España

Aunque este sistema concreto es más habitual en países como Estados Unidos, en España se han empleado métodos similares para reducir las poblaciones de conejos en áreas conflictivas. En Cataluña, por ejemplo, se ha recurrido a técnicas de fumigación en zonas agrícolas o en tramos ferroviarios afectados por vivares.

En Aragón, el Gobierno autonómico llegó a autorizar en 2018 la utilización de monóxido de carbono para fumigar madrigueras, especialmente en comarcas con alta densidad de conejos. Según el Plan General de Caza de ese año, la medida se aplicó en más de cien municipios de las tres provincias aragonesas.

Estas acciones permitían incluso a los agricultores actuar por su cuenta dentro de sus parcelas, siempre que no exigieran después indemnizaciones por daños. La destrucción directa de vivares fue una opción contemplada legalmente durante varias campañas.

Polémica por otras técnicas de control

No todas las fórmulas han sido bien recibidas. En Andalucía, la Federación Andaluza de Caza denunció en su día a ADIF por rellenar madrigueras con hormigón, una medida que consideraron desproporcionada y peligrosa. En respuesta, la FAC propuso capturar conejos vivos mediante hurones y redes para trasladarlos a zonas donde sí puedan cazarse legalmente.

«Se trata de aprovechar un recurso cinegético en lugar de destruirlo sin más», defendían entonces desde la federación, apostando por soluciones que no comprometan la biodiversidad ni el equilibrio entre conservación y uso racional de la fauna.

El control poblacional, una necesidad compleja

El conejo de monte es una especie autóctona que, en determinadas circunstancias, puede provocar graves daños a la agricultura, afectar a infraestructuras o competir con otras especies. Por eso, el control de sus poblaciones se convierte en una necesidad en muchas zonas.

Además de la caza regulada, especialmente en modalidades como en mano o al salto, se emplean técnicas como el uso de hurones, trampas o redes. La clave está en combinar métodos eficaces y selectivos con supervisión técnica, respetando siempre la legalidad y el equilibrio ecológico.

Salir de la versión móvil