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Los ecologistas que pidieron prohibir cazar en parques nacionales se quejan ahora de que jabalíes y perros acaban con aves protegidas de Doñana

Un jabalí camina junto a un ave acuática en una foto de archivo. © Shutterstock

En la actualidad, el Parque Nacional de Doñana, de sobra conocido por su rica biodiversidad, está teniendo que enfrentar dos grandes amenazas. Una de ellas es la proliferación de perros asilvestrados, mientras que la otra hace referencia a las consecuencias que sobre sus especies protegidas tienen los ataques de los jabalíes.

En este sentido, una muy buena solución para evitar tratar de luchar contra ello podría ser la práctica de la caza. Sin embargo, los principales grupos ecologistas de nuestro país lograron poner fin a la actividad cinegética en parques nacionales, como es el caso de Monfragüe o Cabañeros. Esto se traduce, por lo tanto, a evitar el control de la sobrepoblación de ungulados y así lo ha sufrido dicho entorno andaluz.

Un jabalí en Monfragüe. © Shutterstock

Las quejas de los ecologistas tras prohibir la caza

A pesar de ello, ahora, desde Ecologistas en Acción y SEO/BridLife han denunciado el fracaso reproductor del morito común y garza imperial en este mismo Parque Nacional de Doñana por las deficientes medidas de conservación, tal y como ellos mismos han explicado.

Los jabalíes han logrado acceder a los nidos de ambas especies y han destruido la mayor parte de su colonia en dicho entorno natural. La caza era la que se encargaba de controlar las poblaciones de, entre otros, estos animales y, tras prohibir su práctica, están siendo los propios ecologistas quienes sufren sus consecuencias.

Tradicionalmente los cazadores, con determinados permisos especiales, han ayudado a capturar o controlar los perros salvajes en diferentes entornos. Estos, por su parte, están siendo otra de las amenazas que recientemente sufre Doñana y es que la aprobación de la Ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales, con su blindaje a dichos canes, deja poco margen de actuación.

Un jabalí en el barro. © Shutterstock

De hecho, un reciente estudio, titulado ‘Perros cimarrones en el Parque Nacional de Doñana. Un estudio usando fototrampeo, ciencia ciudadana e inteligencia artificial’, ha alertado sobre la presencia de perros en Doñana y su impacto negativo en la biodiversidad.


Los ecologistas que lograron prohibir cazar en parques nacionales se quejan ahora de que los jabalíes acaben con aves protegidas de Doñana


Por si la amenaza de la sobrepoblación de jabalíes no era suficiente, a día de hoy Doñana también sufre las consecuencias de la proliferación de estos perros asilvestrados, como es el aumento de la presión de depredación, el riesgo de enfermedades y la alteración del equilibrio ecológico de los ecosistemas.

Si bien ambos problemas tienen mucho que ver con las reivindicaciones de los grupos ecologistas, también son ellos quienes han denunciado las graves consecuencias que las dos especies están causando tras la prohibición de la caza en los parques nacionales.

       
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