El Proyecto Coturnix, la mayor iniciativa de seguimiento de la codorniz en España y Europa, afronta en 2025 uno de sus mayores desafíos: la realización de dos censos simultáneos a nivel nacional. Bajo el lema #CoturnixChallenge, miles de cazadores están llamados a participar los días 15 y 23 de agosto en esta acción científica sin precedentes que busca estimar el tamaño poblacional de la especie.
El primero de los censos tendrá lugar el 15 de agosto en las comunidades donde ya haya comenzado la media veda, mientras que el 23 de agosto se celebrará una gran jornada de censo unificado en todas las regiones españolas. El objetivo es claro: aportar datos sólidos que permitan calcular la población de codornices en nuestro país, requisito imprescindible exigido por la Unión Europea para el seguimiento de especies cinegéticas.
La participación de los cazadores será clave. Cada colaborador deberá anotar la distancia recorrida durante su jornada de campo y el número de codornices avistadas. Estos datos, junto con otros parámetros como los obtenidos por dispositivos GPS instalados en los perros de caza, permitirán transformar las observaciones en estimaciones reales del tamaño poblacional.
Una herramienta científica con vocación cinegética
El método de seguimiento activo SEC, desarrollado por la Universidad de Barcelona, es uno de los pilares del proyecto. A diferencia de los sistemas pasivos, como el programa SACRE, el SEC se adapta mejor al comportamiento errático y esquivo de la codorniz, proporcionando datos mucho más fiables.
Actualmente hay 31 puntos SEC en funcionamiento en el país, cifra que se ampliará pronto a 54 gracias al respaldo de administraciones como las juntas de Castilla-La Mancha, Andalucía, Extremadura, Castilla y León o el Gobierno de La Rioja, así como a la financiación de Mutuasport. Esta expansión es un paso decisivo para consolidar una red nacional de observación continua.
Cinco años de datos que ya han marcado la diferencia
Desde su inicio, Coturnix ha movilizado a más de 5.000 cazadores de 45 provincias. Gracias a ellos se han recopilado más de 65.000 alas de codorniz y se han realizado cerca de 3.000 censos mediante la app CensData del Observatorio Cinegético. Esta información ya ha sido fundamental para frenar dos intentos de prohibición de la caza de codorniz por parte de la UE, sustentados en estudios con metodologías poco precisas.
«Estamos consiguiendo información nunca antes obtenida para esta especie», han destacado desde Fundación Artemisan. El trabajo coordinado entre cazadores, científicos y administraciones demuestra que es posible conjugar la caza sostenible con la investigación de calidad y la conservación efectiva.
Un nuevo reto para demostrar el compromiso del sector
Coturnix ha marcado un antes y un después en la manera en que el mundo cinegético se relaciona con la ciencia. Este año, con el #CoturnixChallenge, da un paso más. El llamamiento no es solo a contar codornices, sino a demostrar que los cazadores están comprometidos con la conservación y son una fuente insustituible de datos en el medio natural.
Desde Mutuasport, Fundación Artemisan y la RFEC, promotores del proyecto, invitan a todos los aficionados a unirse al reto. «Queremos demostrar, una vez más, que los cazadores son los primeros interesados en la buena salud de las especies», subrayan.
Puedes obtener más información sobre cómo participar en el reto a través de este enlace: https://fundacionartemisan.com/investigacion/coturnix-challenge/
