La carta remitida por el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios Forestales de Extremadura ha puesto en valor la actuación de la Sociedad de Cazadores «Los Ibores». Gracias a la colaboración de esta entidad se habilitó un acceso adecuado que permitió la carga de agua de los vehículos contra incendios, lo que supuso un refuerzo crucial en las labores de extinción en una zona especialmente vulnerable por la escasez de recursos hídricos.
El escrito, fechado el 21 de julio y publicado por la Federación Extremeña de Caza (Fedexcaza), agradece expresamente la labor de los cazadores, destacando que «acciones como la suya no solo refuerzan la eficacia de nuestra labor preventiva y operativa, sino que demuestran un fuerte compromiso con la protección del entorno natural».
Una labor invisible que protege el monte
El gesto de los cazadores de Los Ibores no es un caso aislado. Según datos de Fedexcaza, las sociedades y cotos extremeños invierten cada año más de 8,5 millones de euros en la prevención de incendios. Este esfuerzo se traduce en actuaciones constantes como el mantenimiento de accesos, podas, desbroces, creación de cortafuegos o la adecuación de balsas y puntos de agua.
Estas tareas, realizadas muchas veces sin apenas reconocimiento social, son determinantes para que las brigadas puedan trabajar con mayor rapidez y eficacia cuando el fuego amenaza. Además, cientos de guardas de coto y cazadores se convierten cada temporada en los primeros en dar la voz de alarma ante cualquier foco, avisando a las autoridades e incluso colaborando en las labores de extinción.
Un respaldo que va más allá de Extremadura
La implicación del sector cinegético no se limita a la región. Un estudio de la Fundación Artemisan cifra en 54 millones de euros la inversión anual de los cazadores españoles en prevención de incendios, dentro de un montante global de 300 millones destinados a conservación medioambiental.
La propia Federación Extremeña de Caza subraya que «los cazadores cuidamos el campo como si fuera nuestro hogar. Invertimos dinero, tiempo y esfuerzo en mantenerlo sano y en evitar que se convierta en un polvorín. No podemos permitir que se criminalice a quienes son, en realidad, una pieza esencial en la lucha contra los incendios forestales en Extremadura».
El futuro: reconocimiento normativo
En las próximas semanas, Fedexcaza presentará un documento que plantea flexibilizar la normativa y reconocer al sector cinegético como una herramienta clave no solo en la prevención y extinción, sino también en la restauración del monte tras el fuego.
«Para los cotos y sociedades afectadas tendemos nuestra mano para todo lo que necesiten», ha recordado la entidad, que también ha mostrado su solidaridad con todos los vecinos que han visto amenazados sus hogares y sus tierras. En un verano en el que las llamas han vuelto a castigar duramente a Extremadura, la implicación de los cazadores se convierte en un argumento más para reforzar su papel en la gestión del territorio.
