Icono del sitio Revista Jara y Sedal

Cyl cambia las normas y multará a los cazadores que cacen un jabalí y no lleven este documento

© Israel Hernández

Hasta hace poco, en Castilla y León era habitual salir a una jornada de caza menor al salto o en mano, encontrarse con un jabalí y, si se abatía, transportarlo sin ningún tipo de documentación. Era completamente legal si contabas con la especie y modalidad autorizadas en el plan técnico de tu coto. Pero eso se ha acabado. Desde este otoño, cualquier cazador que abata un jabalí deberá disponer de un nuevo documento —digital o por escrito— para mover la pieza. Quien no lo haga se arriesga a una sanción.

El nuevo sistema digital CapturCYL, implantado por la Junta de Castilla y León para registrar las capturas de caza mayor, sustituye además los tradicionales precintos físicos por un registro digital de capturas a través de una aplicación móvil. Aunque sobre el papel se trata de un avance para simplificar trámites, en la práctica muchos usuarios aseguran que el sistema está provocando más confusión que soluciones.

Una cazadora y usuaria de la plataforma consultada por Jara y Sedal explica que el cambio ha generado «muchas dudas» y advierte de la necesidad de «no dejar pasar nada por alto» para cumplir con la normativa.

Un estreno con problemas técnicos

La primera versión de CapturCYL, lanzada en abril con el inicio de la temporada del corzo, ya fue un auténtico quebradero de cabeza. La aplicación colapsó, los servidores se saturaron y cientos de cazadores quedaron bloqueados sin poder registrar sus capturas. Los agentes medioambientales, sin acceso a los datos digitales, se vieron obligados a levantar actas manualmente, retomando de hecho el sistema analógico que se pretendía abandonar.

Con la llegada del otoño, el panorama no ha mejorado. Los cazadores denuncian que los errores de conexión, la complejidad del registro y la falta de claridad sobre los pasos a seguir están generando inseguridad.

¿Qué hago si cazo un jabalí?

Para cumplir con la normativa en el caso de modalidades como el jabalí al salto, en mano o en espera, el usuario debe activar antes de salir al campo la autorización que le habrá generado su gestor o titular del coto a través de la plataforma creada al uso, pulsando en “Firmo/Acepto”.

Una vez abatida la pieza, debe confirmar la captura y validar la localización desde el apartado “Capturas” de la aplicación, pasos tras los cuales CapturCYL genera un código QR que actúa como justificante legal. Si bien en otras especies se exige adjuntar una foto, en el caso del jabalí no es necesario.

Un cazador junto a un jabalí recién abatido. © Israel Hernández

Como alternativa, la Federación de Caza de Castilla y León solicitó recuperar el sistema en papel. En ese formato, tanto el titular del coto como el cazador deben firmar una autorización generada mediante la plataforma desarrollada por la Junta y registrar manualmente la información de la jornada. El titular dispone de siete días para subir los datos a la plataforma oficial.

Riesgo de perder jornadas de caza

El sistema también afecta a los cotos cuyo plan técnico establece un número limitado de días de caza, por ejemplo, en modalidades como la caza del jabalí al salto o en mano. Si un cazador no se da de baja correctamente al finalizar la jornada, podría estar consumiendo jornadas autorizadas sin haber salido al campo, algo que preocupa especialmente a las sociedades con numerosos socios. «Esto, en sociedades con cientos de socios, es prácticamente inviable», lamenta la cazadora consultada.

Un cazador se dispone a precintar un corzo abatido en Castilla y León. © Ángel Vidal

Materiales formativos para adaptarse al cambio

La Junta de Castilla y León ha acompañado la implantación de CapturCYL con una serie de materiales formativos dirigidos a cazadores y titulares de coto. La Consejería de Medio Ambiente ha publicado en su web oficial varios videotutoriales y guías prácticas que explican paso a paso cómo utilizar la aplicación: desde registrar una captura o activar un precinto hasta consultar el cuaderno de campo digital.

El objetivo de estos recursos es facilitar la adaptación al nuevo sistema y evitar errores que puedan derivar en sanciones. Desde la administración recuerdan que manejar correctamente la herramienta es obligatorio para cumplir con la normativa de caza mayor en la comunidad. Por eso insisten en que los usuarios deben dedicar tiempo a familiarizarse con la plataforma antes de salir al campo.

Pese a las ayudas disponibles, la realidad muestra que las dificultades continúan. Muchos cazadores siguen encontrando problemas para registrar sus capturas, incluso después de haberse formado. Los fallos técnicos, la falta de cobertura o la confusión con los pasos a seguir siguen siendo frecuentes. Por ello, la recomendación general es consultar siempre con el gestor o titular del coto y revisar la autorización antes de cada jornada para evitar incidentes o sanciones inesperadas.

Salir de la versión móvil