Nuestro seguidor Eduardo Ruiz encontró dos cabezas de corzo semienterradas y entrelazadas en la provincia de Burgos a principios de junio mientras buscaba setas. Nos cuenta cómo sucedió el hallazgo.
21/6/2019 | Redacción JyS
El cazador burgalés Eduardo Ruiz alias ‘Fauna‘ encontró, a principios del mes de junio, una curiosa imagen mientras se encontraba recogiendo setas en una finca de la provincia de Burgos.
Se trataba de dos cabezas de corzos muertos con sus cuernas entrelazadas debido probablemente a una pelea. En esa peculiar posición murieron ambos cérvidos y así fue como ‘Fauna’ se encontró con ellos en un recóndito lugar entre espinos y zarzas tras meses o quizá años de su muerte.
«Estaba tranquilamente recogiendo setas cuando, de repente, vi huesos y me acerqué a ver de qué se trataba», explica el cazador, que se encontró con la particular escena. «Entonces, vi una cabeza, fui a cogerla y había otra entrelazada a ella, pero curiosamente estaba enterrada en el suelo», relata. «Fui tirando de ella y salió», admite Ruiz, que además de las setas también es aficionado a la caza de jabalíes, ciervos y corzos.
¿Cómo sería la muerte de los dos animales? Probablemente las heridas provocadas antes de que se entrelazasen las cuernas y la imposibilidad de escapar haría rápida mella en ellos. Sin duda es una imagen un tanto particular: morir a sólo unos centímetros de tu enemigo mientras quieres acabar con él.
El vídeo de dos ciervos enredados por su cuerna en una dura pelea
Estos dos ciervos luchaban por demostrar quién es el más fuerte. La situación se complica cuando uno de ellos cae al suelo con su cuerna enredada en la de su oponente. No podemos contarte mucho más. Lo mejor es que lo veas:
