Las imágenes ponen en evidencia un problema que aumenta en toda Europa: las colisiones de tráfico con especies animales como corzos, ciervos o jabalíes.
15/2/2017 | Redacción JyS
Según informa la policía de Hamburgo, el pasado lunes tuvo lugar un brutal accidente en la carretera alemana K-27, entre las localidades de Undeloh y Wesel. Un hombre de 42 años de edad, iba camino de Wesel cuando un ciervo irrumpió en la calzada impactando de lleno contra el parabrisas del vehículo.
El animal, de 250 kg, murió por el impacto y el conductor quedó atrapado bajo él por lo que tuvo que ser rescatado. El hombre sufrió heridas graves en la cabeza y tuvo que ser evacuado en helicóptero al hospital más cercano. La carretera permaneció cerrada al tráfico durante una hora.
Hecho común en toda Europa
El caso ocurrido en Alemania no es un hecho aislado. Según publica el diario La Región, sólo en Orense el 56,6% de los accidentes se producen a causa de la irrupción de jabalíes en las carreteras. En 2016, 655 accidentes -de un total de 1.135 con fauna salvaje en los que tuvo que intervenir la Guardia Civil en la misma provincia- fueron provocados por los suidos.
Pero si miramos los datos publicados por la Guardia Civil de Tráfico, en otras provincias como Palencia, Soria o León podemos ver que los zorros y los cérvidos son otros de los grandes problemas de las carreteras españolas.
Aunque, por otro lado, hay que tener en cuenta que la mayoría de accidentes con víctimas mortales o graves en los que se ve involucrado un animal, los daños se producen por maniobras del conductor para evitar la colisión, es decir, cuando el conductor pega un ‘volantazo’ para eludir el choque.
Por ello la DGT aconseja reducir la velocidad en la medida de lo posible y no evitar la colisión. Este consejo se une a otros que debes tener en cuenta cuando conduzcas por zonas en las que el paso de fauna silvestre sea frecuente.
Soluciones preventivas
Además de los consejos que se ofrecen a los conductores, varios gobiernos regionales han adoptado medidas para intentar frenar este tipo de accidentes. Entre estas medidas destacan los repelentes olfativos o las balizas reflectantes que distraen a los animales utilizadas en algunas carreteras del norte peninsular, además del vallado de algunas de las vías más conflictivas.