El BOE ha publicado, este miércoles, la decisión aprobada por el Consejo de Ministros de destinar a través del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico una subvención de 959.999,98 euros a cuatro organizaciones ambientales -Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, WWF y SEO/BirdLife- para acciones de protección del medioambiente.
La medida ha generado una importante polémica en el mundo rural y contrasta con la reciente inversión de medio millón de euros realizada por los cazadores federados de toda España para defender la caza a través de los proyectos científicos «Coturnix» y «Zorzales», liderados por Mutuasport.
El dinero público que recibirán esas cuatro organizaciones ambientales procede del reparto del 0,7 por ciento de la cuota íntegra del Impuesto de Sociedades, mientras que el aportado por los cazadores proviene de la reinversión de los beneficios de Mutuasport en proyectos que ayuden a la defensa del sector cinegético.
España se enfrenta a la peor recesión mundial, según el FMI
El mismo día que el Consejo de Ministros regó con una lluvia de dinero público millonaria a los grupos ecologistas, la economista jefa del Fondo Monetario Internacional, Gita Gopinath, confirmó los peores presagios para la economía española. Según la última edición de las Perspectivas Económicas Mundiales (WEO, en inglés) se contraerá este año un 12,8%.
La brutal recesión de Producto Interno Bruto (PIB) de España duplica a la del resto de países avanzados (-5,8%) y es casi tres superior a la sufrida por la economía global (-4,4%). Ni si quiera Italia (-10,6%) o la India (-10,3%) tendrán unos datos tan negativos como los nuestros.
No es la primera subvención otorgada a los ecologistas en la pandemia
El pasado 17 de abril Jara y Sedal ya anunció en primicia que el Gobierno acababa de aprobar una partida de 547.512 euros para que los ecologistas investigasen cómo reducir los daños del conejo a la agricultura porque la caza provoca «cierta polémica».
La noticia generó una importante polémica y alimentó el cada vez mayor rechazo de la sociedad a mantener con dinero gubernamental aquellas organizaciones que precisamente presumen de ser «no gubernamentales» pero cuyos presupuestos se nutren, en su inmensa mayoría, del dinero de los contribuyentes.