Un agricultor embistió con su tractor el coche de dos animalistas que trataban de boicotear una cacería. El hecho, ocurrido hace unos meses en Inglaterra, ha vuelto a hacerse viral a través de las redes sociales.
El suceso acaeció en una zona del condado inglés de Sussex, donde los coches de los animalistas de un grupo llamado West Kent Hunt Sabs fueron embestidos por el agricultor en un incidente que quedó registrado en vídeo. El grupo había estado interrumpiendo la jornada de unos cazadores en East Sussex cuando comenzó el altercado. Además, el agricultor nada tenía que ver con los cazadores, ya que incluso dañó el coche de uno de ellos por equivocación, según explicó el medio Daily Mail.
En un momento del vídeo se ve cómo un hombre se baja para enfrentarse al conductor del tractor, pero su amigo lo insta a que vuelva a entrar al vehículo, aunque éste sigue en la parte exterior grabando. El tractor se acerca lentamente al vehículo de nuevo mientras el hombre le dice a la policía: «Necesito su presencia con urgencia. Hay un tractor que acaba de estrellarse contra mi coche y me está sacando de la carretera».
Mientras el hombre continúa hablando con la Policía, el tractor choca contra la parte delantera del automóvil, en un momento en el que se puede escuchar el plástico y el metal crujiendo. «No deberían intentar interferir en la actividad cinegética, una actividad legal. Estaban buscando problemas y los encontraron. Que dejen de llorar ahora», señaló uno de los cazadores presentes en la batida, Dennis McKee, al citado medio.
El asunto se encuentra en estos meses en investigación policial.
Unos sabotajes animalistas, por desgracia, comunes en Inglaterra
Este tipo de situaciones lamentablemente son cotidianas en Inglaterra. Semana tras semana, saboteadores organizados se cuelan en propiedades privadas con la intención de boicotear cacerías. Su modo de operar es común: cámara en mano provocan a los cazadores para hacerle perder los nervios y denunciarles ante los tribunales... aunque no siempre les sale bien el experimento.
Hace tres años, ocho animalistas, cuatro de ellos provistos con cámaras, boicotearon una cacería de zorros en el condado de Yorkshire. Las imágenes, donde puede verse el resultado de sus provocaciones y en las que un cazador llega incluso a zarandear a uno de los activistas en el suelo, fueron juzgadas en el tribunal de York Crown, tras el que se retirron todos los cargos contra los cazadores al considerar que no existía delito. Así ocurrió todo.