La tarde del viernes 7 de noviembre se tornó caótica en el pequeño municipio francés de Aouze, en el departamento de los Vosgos. Varios cazadores habían aparcado sus vehículos junto a un campo de maíz para preparar una batida de jabalíes, cuando un agricultor de la zona perdió el control y embistió los coches con su tractor en repetidas ocasiones. Tras ello, descendió del vehículo con una maza y terminó de destrozar los cristales y carrocerías a golpes.
Según el diario Vosges Matin, una de las víctimas, Johann Piroué, se encontraba en el lugar junto a su nieta, su sobrino y un amigo. «Llevo haciendo esto desde que empecé a cazar y nunca he tenido ningún problema», explicó este veterano cazador, de 60 años, que aún no encuentra una explicación a lo sucedido.
Una agresión sin precedentes en la zona
La escena, ocurrida sobre las cuatro de la tarde, dejó atónitos a los testigos. Una mujer permanecía en el interior de uno de los coches en el momento de la primera colisión, lo que multiplicó el pánico. Nadie resultó herido, pero las imágenes del ataque —difundidas por varios medios locales— muestran una violencia inusitada. Los daños materiales superan los 30.000 euros, según las primeras estimaciones.
El agricultor, vecino de Soncourt, fue detenido y trasladado a dependencias de la gendarmería de Neufchâteau, que se ha hecho cargo de la investigación. Las víctimas han presentado denuncia por daños intencionados y puesta en peligro de la vida de otras personas. Los agentes tratan ahora de determinar qué pudo desencadenar una reacción tan desproporcionada ante una actividad legal y autorizada.
@ledauphinelibere Vendredi 7 novembre dernier, vers 16 h, trois véhicules de chasseurs stationnent sur un chemin communal de la petite commune d’Aouze, non loin de Neufchâteau, dans l’ouest des Vosges, à proximité d’une parcelle de maïs qu’un agriculteur s’apprête à ensiler. Objectif : observer et compter le nombre de sangliers dans la parcelle. Quelques instants plus tard, pour une raison que les chasseurs ne s’expliquent toujours pas, l’agriculteur détruit les trois véhicules avec son tracteur puis à l’aide d'une massette tandis qu’une personne se trouvait encore à l’intérieur de l’un des véhicules. Interpellé samedi matin par les gendarmes, il devra répondre de ses actes devant la justice en mars 2026. #SinformerSurTikTok #colere #agriculteur ♬ son original – Le Dauphiné Libéré
Posibles causas y consecuencias judiciales
Por el momento, las motivaciones del atacante siguen siendo un misterio. Los cazadores habían obtenido los permisos necesarios para su labor de reconocimiento, una práctica habitual antes de las batidas, que requieren el consentimiento de los propietarios o la aprobación de la prefectura. Ninguno de ellos había tenido incidentes previos con el agricultor.
De confirmarse los cargos, el hombre podría enfrentarse a una pena de hasta siete años de prisión y a una multa de 100.000 euros. La Federación Departamental de Cazadores de los Vosgos ha evitado hacer declaraciones, aunque fuentes del sector lamentan que este tipo de episodios alimenten una tensión creciente entre agricultores y cazadores en algunas regiones francesas.
El caso ha reabierto el debate sobre la convivencia entre actividades que se llevan a cabo en el medio rural que, aunque están obligadas a entenderse, a veces chocan por la gestión del territorio o la fauna silvestre.