Ninguno de los cazadores daba crédito a lo que tenían frente a ellos. Ni siquiera el rehalero que lo abatió se creía el tamaño del animal cuando lo pesaron.
22/11/2017 | Redacción JyS
Todo ocurrió el pasado sábado en la localidad de Sojuela (La Rioja). Ese día se celebraba una de las ocho batidas al jabalí que se dan en este municipio situado a 14 kilómetros de Logroño. Los cazadores llevaban un tiempo viendo grandes ejemplares, pero ninguno esperaba encontrar algo como lo que vieron ese día.
Al poco tiempo de soltar los perros de las rehalas que batirían el monte ese día se inició una ladra que pronto se convirtió en agarre. El perrero, Jaime Miranda, según cuenta a Onda Cero, vio como sus trece canes aún con las energías intactas se lanzaron sin dudarlo contra un cochino de porte espectacular.
Miranda no lo dudó y se fue hacia allí cuchillo en mano decidido a acabar con el lance de forma certera. Tal y como relata él mismo, el agarre se produjo en una zona limpia del monte, por lo que desde la distancia podía ver perfectamente cómo se iniciaba la lucha. Así que, cuando llegó y viendo que el suido era muy grande no dudo y lo abatió para que no hiriera a ninguno de sus perros.
Sin embargo, ya era tarde para uno de ellos. Miranda cuenta cómo al soltar los perros al jabalí ya muerto, uno de ellos retrocedió y pudo observar que sangraba en abundancia. Entonces avisó a su primo y lo bajó hasta el coche para llevarlo al veterinario más cercano e intentar salvarlo, aunque no fue posible.
Tal y como explica el rehalero, el jabalí aparte de este perro al que dejó casi sentenciado hirió a otros dos canes a los que todavía está realizando curas.
No obstante, la mayor sorpresa llegó cuando finalizada la batida bajaron el cochino al pueblo y lo subieron a la báscula. En ella dio la friolera de ¡175 kilos! Los más longevos de la zona, como el padre del rehalero y el presidente del coto, afirman que nunca se había logrado abatir uno tan grande.
Aquí tienes un vídeo del momento en que lo pesaron:
Abaten en La Rioja un monstruoso jabalí de ¡175 kilos!
