Has tenido suerte y has conseguido cazar un jabalí. Es tu día. El siguiente paso es desollarlo y preparar la carne para llenar el arcón. Cuando acabas, te lavas las manos concienzudamente pero su tufillo no se va. Al entrar en casa, cansado y contento, vas a dar un beso a tu pareja, pero ésta tuerce el gesto y te dice: «Apestas a jabalí». Esto es lo que debes hacer para evitarlo:

Usa un cítrico

cítricos, trucos olor jabalí


Los cítricos son muy útiles para eliminar los malos olores. En este caso debes frotar tus manos con zumo de limón –o de naranja– durante unos minutos y después enjuagarte con agua bien fría. Es muy importante esto último ya que el agua caliente abriría los poros de tu piel y haría que el las partículas que contienen el olor penetraran aún más.

Lávate con enjuague bucal

enjuague bucal, trucos olor jabalí


El enjuague bucal antiséptico eliminará las partículas que causan el mal olor de tus manos, además eliminará cualquier bacteria que pueda quedar. Por otro lado, los enjuagues bucales disponibles en cualquier supermercado tienen olores fuertes, a menta por ejemplo, y eso disimulará el poco olor que pueda llegar a quedar.

Mezcla agua y sal (o alternativas)

Agua y sal, trucos olor jabalí


Coge una pizca de sal con los dedos y crea una especie de pasta con unas gotas de agua fría. Una vez elaborada la mezcla frota con ella tus manos durante unos minutos. Para finalizar enjuágate bien y sécate las manos. Otras alternativas a la sal son el azúcar, el bicarbonato o el café molido. Además estas opciones tienen la ventaja de no irritar las pequeñas heridas que puedas tener en las manos o dedos.

Usa guantes de látex al prepararlo


La mejor manera de que tus manos no huelan a jabalí… es evitando que adquieran el olor. Los guantes de látex no ocupan espacio y siempre los puedes llevar en tu mochila. Póntelos antes de empezar a desollar y no te los quites hasta que hayas terminado: mantendrás a raya su fuerte olor.

Límpiate con toallitas para bebés

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Puede parecer una tontería, pero las toallitas para bebés son capaces de inhibir cualquier olor, por malo que sea. Además, al estar diseñadas para la delicada piel de los niños pequeños limpian estupendamente sin irritar la piel.