El primero de ellos, lejos de hacer caso a las señales y a los propios cazadores, decidió continuar su camino, teniendo que volver sobre sus pasos al poco tiempo seguido del resto del grupo.
16/1/2018 | Redacción JyS
Las siguientes imágenes podrían parecer una locura, y en cierto modo lo son. Sin embargo, parecen ser la tónica habitual en muchos montes españoles a juzgar por las imágenes y denuncias en redes sociales que diferentes cazadores publican cada fin de semana.
Cuando se realiza una montería, o mejor dicho para que esta pueda celebrarse de acuerdo a la legislación vigente, se cuenta con el permiso por parte de la consejería correspondiente en materia de medio ambiente. Además, los cazadores pagan el arriendo del aprovechamiento cinegético de las tierras que van a cazar, amén de contar con sus preceptivas licencias de caza, seguros y un sinfín de trámites necesarios.
Por otro lado, aparte de todos esos permisos, los organizadores de estas deben señalizar correctamente, en tiempo y forma, los límites del terreno que se vaya a cazar.
No obstante, hay quien se salta esas señalizaciones argumentando que «el campo es de todos», cuando no están en lo cierto ya que no se puede caminar por una finca durante una montería debidamente señalizada aunque no esté vallada.
Por último, hay que recordar que en el ejercicio de la caza hay armas de por medio. Y es obvio que por seguridad si adviertes un cartel en el que te anuncian la celebración de una montería debas dar media vuelta. Pues bien, al parecer este grupo de senderistas hizo caso omiso a las advertencias.
Aquí tienes las imágenes. ¿Qué opinas de ellas?
