El cazador valenciano Javier Vidal, que hace unas semanas protagonizaba en Jara y Sedal una peculiar historia en la que narraba cómo había conseguido que su novia –que era anticaza- amase el mundo cinegético tras llevársela una noche de espera, ha vuelto a cazar otro descomunal jabalí que finalmente ha sido medalla de oro con 115 puntos.
Sucedió a principios de este mes de octubre, en el coto social de la localidad valenciana de Bolbaite, cuando Vidal dio con el jabalí en una noche en la que, nada más salir de trabajar sobre las 22:00 horas, se fue al puesto que tenía en el coto a prepararlo para la caza de zorzal, pero su padre le animó a que se quedase allí de espera hasta las 2:30 horas que lo recogería, algo a lo que accedió Javier.
El jabalí echó a unas cabras que se encontraban en el puesto
«Sobre las 0:00 horas de la medianoche, escuché cabras andar por la zona cuando, de repente, a la 1:00 aproximadamente, éstas salieron corriendo como si alguien o algo las hubiese asustado», explica el cazador. Cuando todo se quedó en calma, Javier escuchó romper monte, se preparó y miró a través del monocular pero no localizaba de donde venía ese ruido. «Poco a poco escuché más cerca al animal, volví a mirar y vi que era un tremendo jabalí», asegura Vidal. «Me alegré de que mi padre me hubiera animado a ponerme porque tenía delante de mí un buen animal», confiesa el cazador.
Un certero disparo a 130 metros de distancia
«Me decidí a prepararme rifle en trípode, sin olvidar la serenidad como clave. Esperé que estuviera de culo, encendí la linterna y mi asombro fue que ni se movió. En ese momento, el jabalí se giró un poco y ni me lo pensé: disparé con mi rifle en calibre .300 Winchester Magnum a unos 130 metros y el animal cayó fulminado», explica sobre el lance.
«En ese momento, corriendo llamé a mi padre. Cuando lo vimos, nos abrazamos y disfrutamos de la belleza de este animal», concluye el cazador su relato.
La batida soñada: caza dos monstruosos jabalíes en un puesto que le costó 26 euros
José Alberto Sánchez, conocido entre los cazadores de su zona como ‘El Txori’, vivió en la mañana de este domingo 11 de octubre uno de los inicios de temporada más impactantes que hemos narrado en Jara y Sedal, ya que logró cazar en una batida en Navascués (Navarra) dos jabalíes que finalmente han sido medalla de oro y medalla de bronce. Lo mejor de todo es que el puesto tan solo costaba 26 euros. Así nos lo contó.
La mejor historia de caza de esta temporada tiene un premio valorado en 1.700€ en Jara y Sedal
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