El jabalí es un animal omnívoro. Esta afirmación, contrastada por estudios científicos, es algo que gran parte de los cazadores conoce; sin embargo, hay imágenes que aún nos siguen sorprendiendo. Es fácil ver al suido alimentándose de raíces, insectos que encuentra hozando o incluso huevos, pero no filmarlo corriendo tras aves como gallinas para matarlas y probablemente comérselas.
Es lo que muestra este vídeo en el que dos jabalíes que se han colado en un huerto aparecen corriendo tras las gallinas que había en su interior. Probablemente fueron en busca de comida al lugar y, al encontrarse a las gallinas, decidieron que ese era mejor manjar para ellos, aunque fuese más dificultoso de coger que las patatas o tomates del terreno.
En cuanto los jabalíes ven al conjunto de gallinas, corren hacia ellas, pero la persona que graba la escena decide intervenir y es entonces cuando los suidos huyen del lugar.
En este otro vídeo tomado hace unos años por el fotógrafo Miguel Ángel Bueno, se ve cómo entra en escena un gran jabalí que se encontraba careando. Al llegar a un árbol bastante grueso se detiene y comienza a rascarse, a dar colmillazos… pero algo llama su atención.
Se trata de una gallina muerta. Entonces se produce algo sorprendente, el jabalí se encarama con sus patas delanteras al árbol y comienza a tirar de la gallina con la boca.
Los jabalíes, según la ciencia, pueden amenazar a aves protegidas en nuestro país
Un reciente estudio científico liderado por la Universidad Complutense de Madrid y hecho en colaboración con científicos del Instituto de Investigación de Recursos Cinegéticos (IREC), centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, de la Universidad de Castilla-La Mancha y de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, demostró cómo la caza es más necesaria que nunca debido a que los jabalíes amenazan las aves acuáticas protegidas de zonas como las Tablas de Daimiel.
El estudio, publicado en la revista Ecological Indicators, señala que el incremento de jabalíes que se está produciendo en casi el 80% de los humedales afecta también a la población del conejo silvestre, que es una presa clave para muchos depredadores amenazados, como el águila real. Este es el estudio completo.