Las siembras son un gran y perfecto encame para los jabalíes, especialmente cuando éstas se encuentran altas por dos razones principales: el refugio que le ofrecen sin que nadie les moleste durante todo el día y el abundante alimento del que disponen en ese lugar. Pero, cuando la siega llega, pueden ocurrir imágenes como la siguiente, en la que un jabalí se queda sin refugio y arremete contra un cazador.
El jabalí, que trata de escapar por un maizal recién cosechado, endereza su trayectoria y se lanza directo a por el cazador, que aprieta el gatillo confiado y logra abatir a la pieza en el último segundo.
Por último, recordamos cómo hace unos meses veíamos el vídeo de un agricultor que había grabado cómo una enorme piara de jabalíes salía a su paso mientras cosechaba. La filmación destacaba por su espectacularidad. Días más tarde, compartíamos otra grabación en la que aparecía un hombre que avanzaba con su coche junto a un campo cultivado. De repente gritaba y comenzaban a salir jabalíes corriendo en todas direcciones. Eran tantos que resulta imposible contarlos.
