Los tres mecanismos que te presentamos a continuación te darán la ventaja de poder bucear y contemplar el fondo marino sin necesidad de cargar con pesadas botellas de oxígeno.
25/7/2017 | Redacción JyS
Triton Gills
Jeabyun Yeon, de origen sueco, ha diseñado un innovador artilugio al que ha denominado Triton Gills. Este artefacto te permite bucear sin tener necesidad de salir a respirar a la superficie durante 45 minutos. El único inconveniente es que la profundidad máxima a la que se puede utilizar es de 4,5 metros.
Las branquias artificiales Triton Gills funcionan como las de un pez de verdad: disponen de un microcompresor que filtra el agua a través de una serie de pequeños poros y así logra extraer el oxígeno presente en este medio, que va almacenando en un pequeño tanque que incorpora. Su precio ronda los 300 euros.
Cristal Aquaman
El cristal que lleva el sobrenombre del superhéroe, por otorgar la capacidad de respirar debajo del agua, permite a quien lo utiliza obtener oxígeno en este medio “casi eternamente”.
El cristal Aquaman funciona con un filtro de cobalto que filtra las moléculas de agua, separando el oxígeno del hidrógeno para permitir al usuario respirar debajo del agua. La capacidad de este artilugio será el equivalente a tres botellas de oxígeno. Su liberación se produciría a partir del calor o mediante la exposición a una baja presión de oxígeno.
Sus desarrolladores afirman que el Aquaman podría tener también múltiples usos médicos para personas con problemas respiratorios.
Scorkl
Su funcionamiento es sencillo: el aire se almacena en un tubo cilíndrico y luego se va liberando a demanda del usuario por una boquilla. Además, Scorkl incorpora un medidor que señala cuánto aire queda dentro. Pero la gran diferencia respecto a otros dispositivos similares es que el Scorkl se puede rellenar mediante una bomba de mano que se incluye en el kit de venta; además esta bomba filtra las impurezas que contiene el aire.
Desde la empresa, sin embargo, advierten que los usuarios que nunca hayan recibido clases de buceo no deberían utilizar el dispositivo por debajo de los 3 metros de profundidad, ni más de cinco veces al día.