Por Juan Conde (Armería Nieremberg)
A la hora de elegir la mejor munición para cazar jabalíes debes tener en cuenta cuatro factores: poder de parada, calibre, punta y grains. A continuación te explicamos todo lo que debes tener en cuenta.
1. Poder de parada ¿De qué depende?
Es un término muy usado entre los cazadores y hace referencia a la capacidad que tiene un proyectil de frenar en seco la carrera de un jabalí. Hay que tener en cuenta que estamos disparando sobre un animal que en muchos casos viene a la carrera y cargado de adrenalina. Por eso es básica la elección de la munición de expansión rápida y con la energía suficiente para que el impacto sea tan contundente como para frenar la carrera del cochino.
Ten en cuenta que un ejemplar puede pesar desde un par de decenas de kilos a superar los 100 con holgura, por lo que la munición tiene que ser apta para unos y otros. Además, son animales increíblemente duros que lucharán hasta el final si resultan heridos, por lo que la precisión es siempre crucial, independientemente de la elección de la bala.
2. ¿Cuál es el calibre ideal para una montería de jabalíes?
Aunque teniendo en cuenta el peso de los jabalíes y la forma de caza en España es más que suficiente cualquier cartucho que se encuentre por encima del .270. Win., mi recomendación es que escojas un calibre un poco más potente, siempre con un proyectil blando con buena expansión, y comprendido entre los 150 y los 225 grains de peso, según el calibre. Un factor a tener en cuenta es la distancia de tiro. Si es corta, con una bala excesivamente rápida puede provocar una expansión descontrolada antes de tiempo y no llegar a penetrar lo necesario para abatir limpiamente al jabalí.
Cartuchos como el .308 Win. o el archiconocido .30-06 son capaces de desarrollar impactos adecuados con la punta correcta y, además, ofrecer al cazador un retroceso suave y controlado que facilita la repetición del disparo si fuera necesario. Pero si lo que quieres es potencia tienes en el mercado una amplia oferta capitaneada por el 8x68S, .300 Win. Mag. y el .338 Win. Mag. Estas son opciones mágnum que ofrecen una mayor potencia, mayor velocidad, pero la coz que se lleva el cazador con cada detonación es digna de mención. Si te ves fuerte y capaz de soportar sus acometidas, son una opción fantástica.
3. ¿Qué puntas son las más recomendables?
Hoy en día ya hay fabricantes que desarrollan proyectiles específicos para batida, y el abanico es cada día más amplio. Hace unas décadas se usaban balas desarrolladas en otro continente como Norteamérica que estaban pensadas más para la caza de un ciervo mula u oso negro en rececho y tiros a una distancia media o larga. Tenemos que tener en cuenta que en la mayoría de los casos las distancias de tiro en montería son muy cortas, y por ello necesitamos proyectiles que se comporten bien a esas distancias y a la elevada velocidad con la que impactan.
Necesitamos que sean lo suficientemente expansivas para que produzcan un importante shock hidráulico (la cavidad y las ondas generada tras el impacto) al entrar en el cuerpo y la suficiente expansión controlada, por si atravesamos hueso o es un tiro más sucio entre el monte. El proyectil puede ser de punta de plomo o punta de plástico y su composición, con núcleo de plomo, doble núcleo o monolíticas (sin plomo). El grosor de la camisa o el hecho de que esté soldada o no al núcleo nos ofrecerá un rendimiento distinto en cada caso y calibre que elijamos, pero es preferible que peque de blanda.
4. ¿Cuántos grains son necesarios para detener a un jabalí?
Para los no iniciados debemos aclarar que la expresión grains viene de la cultura anglosajona y americana, y es desde hace décadas la unidad de medida establecida para el peso de los proyectiles y la carga de pólvora: un grain es igual a 0,06 gramos. Como hemos dicho antes, para el tipo de fauna en España sería suficiente un calibre mediano como el 270 Win. o el .30-06 con un proyectil de unos 150 grains de media. Pero por las características del tiro en montería y la imposibilidad de colocar el tiro con el tiempo suficiente y las distancias de tiro antes mencionadas, solemos cazar con calibres y munición con más peso del que deberíamos. Por ejemplo, para el .30-06, encontramos balas en el mercado desde 150 grains hasta 220, pero lo más aconsejable seria usar 165 o 180 para obtener un buen compromiso entre expansión y penetración y conseguir buenos resultados.
Si nos pasamos de peso perderemos velocidad y el culatazo también se verá aumentado. Por otro lado, los proyectiles ligeros con punta de plástico suelen ser muy expansivos, pero en algunos casos nos darán problemas en un disparo enmontado y no penetrarán lo suficiente si dan con hueso. Primero hay que tener claro el tipo de bala que queremos usar y ver los pesos disponibles para encontrar el equilibrio. Déjate asesorar en tu armería, al final la experiencia personal es lo que cuenta.