El siguiente vídeo muestra el increíble cobro del perro de caza de un cazador sevillano que es capaz de bajar un zorzal que había quedado enganchado en lo alto de un naranjo. El hecho tuvo lugar en uno de los cotos que el cazador sevillano Antonio Batista Hidalgo, natural de Guadajoz (una pedanía del municipio de Carmona), tiene en la Sierra Norte hispalense.
Batista estaba cazando en el puesto, donde le acompañaba su perro ‘Nono’. Se trata de un epagneul bretón de dos años y medio de edad que cobra las piezas que su dueño va abatiendo en el transcurso de la jornada: «Cuando ve el pájaro caer, sale a por él, y en este caso fue corriendo en su dirección. Mientras él venía, abatí otro, por eso me asomé a ver por qué tardaba tanto. Lo vio hacer el intento de volar un par de veces en la rama y lo cogió finalmente», relata. Antonio explica a la redacción de Jara y Sedal que «las ramas de los naranjos están bajas por el peso de los frutos, y eso hizo que el animal llegase a por él».
Antonio no deja de mostrar su admiración por él y destaca que el cobro es su principal habilidad: «Es un animal muy inteligente para localizar a los animales cuando los abates. Está el primero para todo: para salir o montarse del vehículo, para cobrar…. para lo que necesites», concluye el cazador.
