El pasado fin de semana, un grupo de cazadores de la localidad ciudadrealeña de Carrión de Calatrava realizó un gesto heroico por una liebre, uno de los animales de menor más amenazados en esta zona debido al brote de mixomatosis que arrastra la especie desde el año 2018.
Un pastor de una finca cercana al municipio los llamó debido a que, desde hacía dos días, una rabona se encontraba atrapada en el fondo del pozo, de seis metros de hondo. Los cazadores no se lo pensaron dos veces y acudieron prestos a la llamada del ganadero para salvar al mamífero, que ya estaba desnutrido y deshidratado.
El cazador José Manuel Córdoba, uno de los encargados de rescatarla, ha explicado a la redacción de Jara y Sedal cómo cogieron una soga para bajar hasta el fondo del pozo. «Sabíamos que era una situación arriesgada, pero lo hicimos porque amamos de verdad la naturaleza y los cazadores somos los mejores ecologistas», pone en valor Córdoba.
Al bajar al fondo del pozo, éste lo primero que hizo fue dar de beber a la liebre: «Le quedaba poco de vida. Llevaba más de dos días ahí, y con el calor que hace imagínate cómo estaría el animal», detalla el cazador, que explica además que «ya se van viendo muchas más liebres en el lugar» debido a la bajada de la incidencia de la mixomatosis. «En nuestro coto, que tiene 200 socios y unas 40.000 hectáreas, es un alivio ver cómo esta especie vuelve de nuevo a la vida», argumenta.
Otro extraordinario gesto de dos cazadores de Extremadura que se encontraron una liebre atrapada
Dos cazadores extremeños -padre e hijo- caminaban este fin de semana por su coto privado, ubicado en las cercanías de la localidad cacereña de Trujillo cuando, de repente, se encontraron con una liebre que se encontraba atrapada en un vallado. Rápidamente se bajaron del vehículo, la liberaron y la soltaron de nuevo en el coto: así lo hicieron.