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Caza tras un duro rececho un bonito ciervo con un disparo a más de 400 metros

El ciervo de 14 puntas. @ I. M.

El cazador catalán Iván Martínez Muñoz, de 37 años de edad y natural de Barcelona, cazó hace unos días, tras tres jornadas de duro rececho en un coto en abierto en el Pirineo leridano, un enorme ciervo de 14 puntas a casi 400 metros de distancia. Según explica el cazador a Jara y Sedal, «estuvimos tres días detrás del animal hasta que nos dio una oportunidad a casi 400 metros que supe aprovecharla para poder abatir a este increíble ciervo».  Después de medición en verde, su trofeo es medalla de bronce.

«Era un venado que ya teníamos controlado desde hacía días», sigue explicando. La primera tarde de rececho fue «muy oscura» por las nubes, «en la que ya no se veía nada y por el ruido del caminar y del roce de las plantas nos desafió con unos berridos muy grandes», explica Martínez.

«Por el tipo de berridos, nos parecía un animal grande y viejo como para pensar que sería bueno, por ello decidimos intentarlo a la mañana siguiente, saliéndonos al trote junto con su harén de hembras», que eran cinco en total. «Eso hizo dificilísimo el disparo, ya que no nos pareció acertado llevarlo a cabo desde nuestra posición, por lo que decidimos intentarle la entrada desde otro punto, pero sin acierto, ya que siempre nos daba esquinazo», describe el cazador.

A la tercera, la vencida

Más imágenes del rececho del ciervo de 14 puntas. @ I. M.

El último día de rececho lo intentaron de nuevo, procediendo del mismo modo que el primer día: «Nos pareció la mejor opción», señala el cazador sobre la táctica a emplear. Por eso, «nos colocamos casi de noche y sucedió lo mismo que aquella tarde: el ciervo salió del bosque junto con su grupo de hembras y fue en ese justo momento cuando nos sorprendió con un berrido enorme».

Iván preparó su rifle Merkel Speedster en calibre .300 WM equipado con munición Hornady Precision Hunter de 200 grains. «Me coloqué en el suelo tumbado sabiendo que saldría, apareció a los pocos segundos pero la distancia de tiro era grande ya que casi llegaba a los 400 metros. Aún así merecía la pena intentarlo. Corregí la distancia en la torreta balística de nuestro equipo y, con el primer disparo el animal cayó sobre sus patas», narra sobre el momento culmen del lance Iván.

Un 2020 con suerte para Iván: este verano cazó un corzo con una cuerna de 30 centímetros

El cazador, con el tremendo corzo. / JyS

Iván abatió el pasado 4 de agosto un corzo con unas larguísimas cuernas de 29 y 30 centímetros que quedará para su recuerdo. Lo hizo en un coto situado entre las localidades de Solsona y Perves (ambas en la provincia de Lleida). Así narró el apasionante lance a Jara y Sedal.

       
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