Hay lugares querenciosos en el monte desde donde contemplar todo tipo de fauna, pero en el que un cazador toledano cuya identidad prefiere mantener en el anonimato colocó esta cámara de fototrampeo es de los mejores que hemos visto en Jara y Sedal, ya que logró grabar a un animal único: un meloncillo albino.
Durante las semanas que la cámara estuvo grabando en este lugar de la provincia de Toledo, el cazador logró esta impactante imagen, que tal y como confirma a este medio el veterinario Carlos Díez, de Ciencia y Caza, «parece un caso de albinismo, algo que es raro pero que no se debe a ninguna enfermedad».
Generalmente, un animal colorido como este meloncillo que nace blanco o parcialmente blanco puede haber sufrido dos fenómenos: albinismo o leucismo. ¿En qué se diferencian? El leucismo solo provoca una pérdida parcial de pigmentación. Esto puede provocar que el animal tenga la piel o las plumas de color blanco o irregular. Sin embargo, las células pigmentarias de los ojos no se ven afectadas por la afección: su color es normal. Esta es la principal característica que nos ayuda a diferenciarlo del albinismo.
En el albinismo, que es lo que parece afectar a este meloncillo, el cuerpo del animal carece de melanina. Esta está presente en la piel y es lo que da color a estas, a las plumas, el cabello y los ojos. Los animales con albinismo son de color blanco o amarillento pálido, y tienen ojos muy pálidos, a menudo de color rosa o rojo, que es el color de la sangre que reflejan.
El meloncillo, un depredador en expansión
Aunque, como aparece en esta imagen, puede ser solitario, lo más frecuente es que el meloncillo viva en compañía de otros congéneres, cazando en grupo y compartiendo las presas.
El meloncillo es un típico depredador oportunista que aprovecha las fuentes de alimento disponibles, si bien tiene predilección por pequeños mamíferos, incluyendo al conejo de monte, o aves como la perdiz. En su dieta incluye también invertebrados y vegetales.
Graba la impactante lucha entre un zorro y un meloncillo en Toledo
El fotógrafo y colaborador de Jara y Sedal José David Gómez, dedicado al turismo fotográfico a través de sus hides, ha grabado el increíble enfrentamiento entre un zorro y un meloncillo. Los depredadores se disponían a alimentarse cuando coincidieron en tiempo y espacio con el fotógrafo, que captó las imágenes en un coto de caza de la provincia de Toledo, según ha explicado a esta revista. Este es el vídeo.