¿Qué necesitas?

● Correa de nylon de 4 a 6 cm de ancho y 230 cm de longitud (unos 3 euros).
● 2 anillas ovaladas del ancho de la correa (1,20 euros) y otra circular del mismo diámetro (0,80 euros).
● Mosquetón de 6 a 8 cm de longitud (1,25 euros).
● Cable de acero de 0,5 cm de grosor y 40 de longitud (0,60 euros).
● Cable con funda plástica de 0,5 cm de diámetro interior.
● Tijeras, aguja, navaja, arco de sierra, lija del número 80, estaño, soplete e hilo de nylon.

Corta la correa


Dale un corte a la correa de nylon con ayuda de las tijeras. La longitud idónea será de aproximadamente unos 2,30 metros.

Dobla la correa por la mitad


Plega la correa por la mitad e introdúcela en las dos anillas ovaladas como muestra la imagen. Utiliza la misma técnica con la que puedes variar la longitud de las correas de tus mochilas para poder cruzarla en tu pecho y ajustarla de la manera correcta para poder ejercer una mayor tracción sobre el terreno.

Cose un último tramo fijo


Debe ser de unos diez centímetros, de manera doble las dos anillas con aquella otra que situaremos al final de este tramo junto al mosquetón, como ves en la imagen.

Realiza dos lazos con el cable de acero


Hazlo de manera que obtengas una tramo de unos 30 centímetros de longitud, con dos lazos, uno a cada extremo. Intenta que uno de ellos sea algo más grande para que se ajuste mejor a la jeta de los jabalíes que necesites arrastrar.

Corta un pequeño casquillo de bala


Utiliza el arco de sierra. Las dimensiones deben ser suficientes para cubrir los nudos realizados en el paso anterior. Con el soplete derrite estaño para que el casquillo quede unido y no pueda deshilacharse el nudo. Cuando se enfríe, lija las imperfecciones.

Coloca pequeños tramos de plástico


Nosotros lo hemos hecho cubriendo el cable de acero. Puedes utilizar los de un cable eléctrico o recurrir a una envoltura de cinta aislante. Se trata de que el cable no dañe los colmillos de los jabalíes que tengas que sacar fuera del monte.

Introduce uno de los lazos del cable de acero en el otro


Así obtendrás una lazada corrediza. Une el mosquetón al lazo libre y… ¡listo! Ya tendrás una práctica correa. Utiliza la lazada para colocarla y ajustarla en la mandíbula superior por detrás de las amoladeras. También puedes ‘atarla’ a las cuernas de corzos, ciervos y otros ungulados o bóvidos y acercar las canales a tu vehículo sin problemas.