Un joven cazador aragonés consiguió abatir el pasado sábado 16 de abril en un coto social de la región un descomunal corzo que ha revolucionado las redes sociales. Jara y Sedal ha conseguido contactar con él para poder compartir el lance con todos nuestros seguidores.
El cazador, que prefiere mantenerse en el anonimato, afirma que lo había visto por primera vez enero, cuanto el animal portaba un impresionante trofeo aún con borra. «Desde entonces lo he visto un montón de veces. La primera vez que lo localicé parecía que llevaba una peluca», bromea sobre las enormes dimensiones de un trofeo que, desde un primer momento, le quitó el sueño.
La primera salida, en Viernes Santo
El primer día que el joven pudo salir tras los duendes fue el pasado viernes. «Antes no teníamos los precintos», comenta sobre una pequeña «confusión» en su coto que provocó que el encuentro entre cazador y corzo se pospusiera.
Finalmente, el pasado 15 de abril el joven protagonizaba su primera salida y, aunque le fue imposible localizar al animal que buscaba, confiesa que cazó otro «bastante bueno». Esa misma tarde, no pudo volver a salir de caza, por lo que tuvo que dejar ya para el sábado el segundo rececho tras el animal con el que tantas veces había soñado.
Una entrada para enmarcar y el corazón «a mil por hora»
Poco después de amanecer, sobre las 8:00 horas de la mañana, este fiel seguidor de Jara y Sedal ya estaba en el campo. «Muy pronto conseguí localizarle», destaca. Esta vez sí, el joven había conseguido dar de nuevo con el paradero del gran animal. En una ladera tapizada de monte y zarzas, el macho careaba tranquilo. Trescientos metros separaban a los protagonistas de nuestra historia por lo que el joven cazador, que confiesa contar con un equipo muy modesto, decidió acercarse más al animal.
«No tengo un rifle de esos que disparan a 500 metros. El corzo estaba tranquilo y por eso me acerqué», apunta. Tras la sigilosa entrada, cuenta a Jara y Sedal que logró apostarse a «unos 70 metros». «Desde que me acerqué hasta que le tiré igual pasaron tres minutos», comenta sobre la pausa que necesitó hacer para tranquilizarse, respirar hondo y tratar de no errar el disparo.
El joven trató de autoconvencerse una vez más. «Tenía que convencerme de estar tranquilo. No podía fallar», relata sobre lo que sintió momentos antes de esperar unos segundos a recuperar el resuello y, ahora sí, apretar el gatillo.
«Cuando lo vi de cerca aluciné»
El cazador cuenta que sabía cómo era el animal porque lo había visto muchas veces, pero aún así, cuando lo tuvo en las manos se quedó sin palabras: «Cuando lo vi de cerca aluciné. Le conté 21 puntas, es increíble», confiesa. Poco después llamaba a su padre para compartir el lance con quien le ha enseñado a cazar. «Le dije que había conseguido dar con el corzo que buscaba, con el que estaba tan obsesionado».
Sobre el coto en el que abatió el gran corzo dice que «todo es monte». En cuanto al animal cree que es el único que sabía de su existencia. «Nadie me había hablado de ese corzo. Sabía que ese animal no lo había visto nadie», asegura.
Por último confiesa a Jara y Sedal que, si bien no está seguro, podría plantearse homologarlo. «Me dijo el taxidermista al que se lo voy a llevar que me lo mediría. Tampoco entiendo mucho de puntos, pero si alcanza una buena puntuación lo pensaré», concluye.
La mejor historia de corzos de esta temporada conseguirá un monocular térmico valorado en más de 2.000 euros
¿Has cazado ya algún corzo destacable, curioso o piensas que el lance fue único? Pues Jara y Sedal y Beretta Benelli Ibérica pueden premiar tu historia gracias a un nuevo concurso. Si tu historia es elegida, puede que ganes un magnífico monocular térmico Burris H50.
Para optar al premio solo tienes que enviarnos un email a info@revistajaraysedal.es, o un mensaje privado a cualquiera de nuestras redes sociales contándonos tu mejor historia de caza de corzos, adjuntar las fotos de ese día y tu número de teléfono, además de seguir en Instagram el perfil de Jara y Sedal (@jaraysedal.es) y el de Beretta Benelli Iberica (@beretta_benelli_iberica). No tiene por qué ser el relato de un trofeo medallable, aunque se valorarán aquellos extraordinarios, curiosos o llamativos a los que les acompañe una buena historia. En este enlace te contamos cómo puedes participar.
Los 11 corzos homologados más grandes de España
Cada temporada es mayor el número de cazadores obsesionados con la caza de este pequeño cérvido, pero tan sólo once personas han conseguido abatir un machazo de más de 200 puntos CIC. Muela, Torrego, Cortina, Mateache… son algunos de los ilustres apellidos que coronan el ránking de los más grandes del país. Estas son sus credenciales.
#1 Sergio Muela (250 puntos) Guadalajara, 07/06/2016
#2 Gonzalo Marian Vicente (245,65 puntos) Guadalajara, 07/2020
#3 Alberto Cortina Alcocer (229,83 puntos) Las Cuevas (Ciudad Real), 01/05/2008
#4 Agustín Torrego (215,53 puntos) Hontoria del Pinar (Burgos), 14/05/2002
#5 Antonio Regalado (214,74 puntos) Burbagena (Teruel), 05/04/2009
#6 Daniel Serrano (214,40 puntos) Valdevetalla (Burgos), 17/10/2001
#7 José M. Gimeno (210,30 puntos) La Casa (Zaragoza), 01/05/2005
#8 Pedro Mateache (207,85 puntos) Riba de Santiuste (Guadalajara), 06/06/1999
#9 Francisco J. Semelas (204,23 puntos) Chércoles (Soria), 11/07/1999
#10 Pedro L. Rubio (201,02 puntos) Magaña (Soria), 14/03/2002
#11 Francisco Franco (200,60 puntos) Las Almanzoras (Zaragoza), 05/04/2009