La asociación de ganaderos Agromuralla ha cargado contra la postura de los «grupos animalistas extremos» porque considera que su actitud en los últimos años ha sido «parte del problema» para poner coto a la sobrepoblación de jabalíes en el medio rural gallego.

24/7/2019 | Redacción JyS

daños jabalies
Acusan a grupos animalistas de ser parte del problema para controlar jabalíes. / La Voz de Galicia

En una carta firmada por un «ganadero afectado», Agromuralla asegura que hay que «tomar medidas y con mucha urgencia», por lo que los ganaderos y agricultores afectados no pueden «tolerar que estos grupos animalistas pongan trabas al control de esta especie», que se ha convertido en una auténtica «invasión que no deja de crecer año tras año».

Según dicen desde la citada asociación, «está claro que las medidas que se tomaron en los últimos veinte años han sido insuficientes», por lo que «hay que dar un paso más» para poner fin a esta situación, porque según se lamentan, «las perdidas económicas son millonarias, pero nada que ver con el desánimo que genera entre las personas» que viven «en el rural».

«Salgan de su confort y vengan a ver cómo el esfuerzo de mucha gente del rural se ve arruinado por esta especie», dicen desde el colectivo a los animalistas, y ponen como ejemplo de los daños que causan los jabalíes «praderas destrozadas, plantaciones de patatas, de maíz, de centeno y demás productos deshechas».

«Su actitud en los últimos años viene a ser parte del problema, porque nuestros políticos tienen más miedo a una nota de prensa de estos colectivos que a que la gente del rural deje abandonado el campo», continúa lamentándose el ganadero afectado que firma el escrito. Por todo ello, insta «a los políticos» a abrir los ojos y a dejar de «poner parches a algo que se les fue de las manos hace mucho tiempo», para que «hagan algo serio de una vez».

Cabe recordar que el sindicato Unións Agrarias (UUAA) ha solicitado hace unos días una nueva legislación para tratar de reducir la población de jabalí en la región e indemnizar por los daños en cultivos y granjas, sin descartar que intervenga el Ejército.