Voluntarios sin conocimiento de campo ni formación científica son reclutados a través de las redes sociales para que salgan al campo y realicen conteos de sus poblaciones en un estudio que aseguran será ‘independiente’.
19/01/2016 | Redacción JyS
No necesitas una carrera en Biológicas. No necesitas saber dónde habita el lobo o cuáles son sus costumbres. Ni si quiera necesitas haber pisado el campo en tu vida. Tan sólo una conexión a Internet, frecuentar páginas animalistas o ecologistas y dejarte seducir por la llamada de un grupo anticaza que quiere realizar un estudio “independiente” y de “escala nacional” que cambie el “cuento del lobo”.
Grupos ecologistas, con PACMA o el FAPAS, han empezado una movilización a través de sus redes sociales con el objetivo de reclutar voluntarios que realicen un “censo independiente de las poblaciones de lobo ibérico”. Tanto PACMA como Ecologistas en Acción o FAPAS han decidido respaldar la iniciativa de un polémico científico del CSIC, Fernando Palacios, al que ayudará en esta iniciativa el fotógrafo naturalista Ángel M. Sánchez. Decimos polémico porque fuentes del propio CSIC a las que ha tenido acceso jaraysedal.es han reconocido que Palacios está cuestionado entre muchos de sus colegas científicos y que ha llegado a proponer “usar helicópteros del ejército para arrancar vallados de caza, o ‘adiestrar’ a los lobos para que aprendan a no consumir ovejas”.
Después de semanas de intensa promoción del proyecto en las redes sociales y en otros foros de Internet, varios grupos de voluntarios se reunieron el pasado fin de semana para preparar la realización el citado censo, que llevarán a cabo sin necesidad de tener experiencia en la materia o formación científica, tan sólo siguiendo las directrices de Palacios.
Desde estos grupos, abiertamente anticaza al igual que el propio profesor, han hecho declaraciones en diversos medios, como El Mundo, donde han argumentado su iniciativa sobre la base de que los conteos oficiales, realizados por técnicos, expertos y científicos de la Administración, “carecen de validez ya que hasta ahora han hecho censos fragmentados e inflados para poder establecer cupos de caza en muchas regiones”. Cuestionan de esta manera el trabajo llevado a cabo por expertos que han utilizado durante décadas medios, métodos y criterios fiables, aprobados por la comunidad científica y por la Unión Europea, bajo cuyas normas se rigen las leyes de conservación y actuación de esta especie. Unos métodos que han permitido que el lobo ibérico se multiplique y expanda colonizando nuevos espacios hacia el sur de España.
Según reconocen fuentes del propio CSIC a jaraysedal.es “los resultados de ese trabajo serán cogidos con pinzas por la comunidad científica”, puesto que como es de prever el resultado del mismo concluirá que la situación del lobo es preocupante y es necesario blindar su protección para alejarlo de la extinción. Prueba de ello es que en la página del propio FAPAS animan a los voluntarios a sumarse a este proyecto para “cambiar el cuento del lobo” y el partido animalista PACMA asegura en su web que se trata de un proyecto “independiente y avalado por el CSIC, tiene como objetivo detener la caza de la especie en toda la Península Ibérica”.
