El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Comandancia de la Guardia Civil de Jaén investiga a un hombre que fue sorprendido por los agentes en la Sierra de Andújar trasladando una cabeza de ciervo, un lomo y un rifle con silenciador. Según ha informado en nota de prensa, los agentes pudieron demostrar el hecho tras realizar una batida en la zona, localizar el cuerpo decapitado del animal y comprobar que el lomo que llevaba el hombre en su vehículo coincidía con el que le faltaba al cuerpo del macho encontrado.

La Guardia Civil lo buscaba desde tiempo atrás

Según fuentes del instituto armado, el dispositivo de la Guardia Civil estaba puesto en marcha tras conocer la existencia de un cazador furtivo en el paraje conocido como Lugar Nuevo, en la Sierra de Andújar, y cuya titularidad corresponde al Organismo Autónomo de Parques Nacionales.

A finales del pasado mes de enero se detectó un vehículo estacionado en una de las zonas conocidas como «calientes» para la práctica del furtivismo. La titularidad del vehículo correspondía a un varón de los que el Seprona tenía como posible autor de los hechos investigados.

En el registro del vehículo se comprobó que en el maletero transportaba la cabeza de un ciervo de 14 puntas, un lomo del referido animal, y en los asientos traseros del vehículo y tapado con mantas, escondía un rifle con bípode de apoyo, un visor telescópico, un silenciador acoplado al arma y cinco cartuchos.

Los agentes demostraron el hecho por el lomo que se llevó

El cuerpo del ciervo decapitado encontrado por la Guardia Civil. © Guardia Civil

El titular del vehículo no pudo acreditar la tenencia y procedencia legal de la carne, del trofeo, ni tampoco de los elementos prohibidos que transportaba.

A continuación, los agentes realizaron batidas por las zonas conocidas como Malabrigo, Lugar Nuevo, el Madroño y río Jándula hasta que localizaron un ejemplar de ciervo macho, decapitado y con una incisión en el lomo izquierdo. El trozo de carne que faltaba coincidía con el hallado en poder del investigado. El cuerpo presentaba dos disparos con entrada y salida.