Esta joven taxidermista recibió la semana pasada en su perfil de Facebook un aluvión de críticas por parte de cientos de internautas contrarios a la caza. Lejos de amedrentarse, ideó esta genial respuesta. 
22/12/2016 | Redacción JyS
Lauren Hull, conocida taxidermista de Oregón (Estados Unidos), ha demostrado no atemorizarse ante las críticas recibidas en su perfil de Facebook por su condición de cazadora y dedicarse a la naturalización de animales. 

Durante las primeras 24 horas fueron cientos los comentarios despectivos que recibió en su perfil de Facebook. En lugar de asustarse, esta fue su reacción:

taxidermista-recibe-insultos-de-animalistas
Imagen publicada por Lauren Hull en su perfil de Facebook. / Lauren Hull.

Texto que aparece en la foto:
«Trolls anticaza de las redes sociales. Gracias por todos los recientes insultos y amenazas de muerte que me habéis mandado. Por desgracia, esta paloma ha tenido que pagar por vuestras groserías. He puesto vuestros nombres en ella para que quede claro que habéis sido vosotros los que habéis provocado su muerte. ¡Continuad! Las palomas son sabrosas y abundantes, ¡y no hay cupos!
#antihuntersheldaccountablmi»
 
Reproducimos también el mensaje que Lauren publicó en su perfil de Facebook junto a la foto anterior:
«Antes de que nadie me condene por matar en vano, esto es una tórtola turca. En mi Estado son una especie invasora y es legal matar todas las que quiera. También diezman nuestros campos de girasoles, ¡y de su carne se obtienen aperitivos deliciosos!
Me siento mal al 2% por atar el nombre de alguien a la tórtola para conseguir mi objetivo, pero siento que es hora de que comencemos a enseñar a los anticaza que sus amenazas e insultos no se irán sin consecuencias
Hace una semana uno de estos anticaza publicó en la página de Eva Shockey que deseaban que su bebé muriera, ¡y todo porque ella es cazadora! Solía ignorar sus comentarios pero siento que se está yendo de las manos y colectivamente ¡debemos pasar a la acción! 
Si dejaran su locura por un minuto e investigaran un poco, se darían cuenta que nosotros somos quienes mantenemos la vida salvaje y sus hábitats. Cada arma, bala, licencia de caza y permiso obtienen impuestos que se destinan a los montes públicos y su conservación. Pero no se puede decir esto de los anticaza. 
Ni lo comprenden ni te escuchan. Así que a veces tienes que hablar su idioma.»