Manifestantes 5J
Más de 300.000 personas, según la organización, se manifestaron ayer en Madrid para exigir la modificación de la ley 42/2007 que condena a la extinción a diversas especies piscícolas y supone la ruina económica para un sector que perderá 3.000 millones de euros.
06/06/2016 Redacción JyS
La madrileña plaza de Colón fue testigo durante la mañana de ayer de la manifestación de pescadores y cazadores más multitudinaria que se ha celebrado en Madrid. Según la organización, más de 300.000 personas acudieron para exigir al Gobierno que modifique la ley 42/2007 y elimine del Catálogo de Especies Invasoras a la carpa, la trucha arco iris, el lucio, el cangrejo rojo, el black bass o el arruí.
A la protesta han acudido representantes de asociaciones de piscifactorías, federaciones de caza y pesca, ONC y entidades de casi todas las comunidades autónomas, que han leído manifiestos en defensa de su actividad y portado pancartas de «Modificación de la ley de especies invasoras», «No queremos matarlos queremos disfrutarlos» o «Basta ya».

El TS obliga a matar los peces, tras la denuncia ecologista

El Catálogo de Especies Exóticas Invasoras, vigente desde 2013, no incluía inicialmente los citados especímenes, pero tras la denuncia de SEO/BirdLife, Ecologistas en Acción y AEMS-Ríos con Vida, una sentencia del Tribunal Supremo del pasado marzo obliga al Ejecutivo a incluirlasen él.
La aplicación de la sentencia supondrá la prohibición de criar y comercializar estas especies para venta o para soltarlos en los ríos, y requerirá que los pescadores que se hagan con ellas no puedan devolverlas, como ocurre ahora en gran parte de la pesca deportiva. Agustí Albiol, de la Plataforma en Defensa de la Pesca, ha recordado que las organizaciones «ya han logrado que el Partido Popular y el Partido Socialista, así como la Federación Española de Municipios y Provincias y muchos pueblos afectados hayan presentado proposición no de ley en la que solicitan la suspensión cautelar de la sentencia» del Supremo.

3.000 millones en pérdidas

Tal y como ha reconocido Agustí, la citada sentencia obliga a exterminar a especies que «llevan en nuestras aguas hace más de dos mil años» y «de mantenerse la sentencia en estos términos miles de empresas tendrán que cerrar y miles de trabajadores perderán sus trabajos». Según la Plataforma en Defensa de la Pesca «el sector sufrirá pérdidas de 3.000 millones de euros».
«Los trabajadores de más de cien piscifactorías de toda españa nos sentimos indefensos ante la sentencia del Supremo, la trucha arco iris no tiene potencial invasor», ha dicho Curro Villarreal, portavoz de la Organización de Productores Piscicultores, que producen entre 5.000 y 6.000 toneladas de trucha no autóctona al año.
José Luis Bruna, presidente de la Federación Española de Pesca y Casting sostiene que la reivindicación de hoy es «del mundo rural contra el urbanita» e insiste en que la actividad de pescadores deportivos «siempre ha convivido con el medio ambiente» y que las citadas especies invasoras «están naturalizadas».
Los pescadores sostienen que las especies prohibidas están naturalizadas
En la protesta se han coreado duros lemas contra los ecologistas como «ecologistas asesinos», «cuántas veces habéis visto a los ecologistas limpiando ríos» o «ecologistas mamones vivís de subvenciones».