Nos hemos planteado conseguir animales bien nutridos en nuestro coto con una inversión asequible. Para ello hemos tenido que evaluar los costes del sustento en los cebaderos, su calidad, el modo de hacerlo y la época y cantidad idóneas. Aquí tienes las conclusiones. 
2/8/2018 | Juan Arce

Dos jabalíes comiendo mazorcas de maíz. / Shutterstock

Cuando planificamos una montería en nuestra finca es habitual proporcionar alimento a los jabalíes unos meses antes de su celebración para atraer el mayor número posible a la mancha que se quiere cazar. Antes, durante todo el año, les habremos aportado maíz o cebada para fijar tanto su querencia en la finca como sus movimientos. Pero… ¿se trata esta última de una medida acertada? ¿Cuál es la más idónea?

Cuestiones económicas  

Aunque algunos de estos últimos años han sido especialmente duros, climatológicamente hablando, si a esto le añadimos la crisis económica de la que para algunos es difícil salir, podemos encontrarnos con un grave problema si optamos por realizar un aporte suplementario y lo único que tenemos en cuenta es el coste de la materia prima a emplear. Si nos movemos por lo económico, generalmente se aportarán grandes cantidades de maíz o remolacha, además de otros productos o subproductos, a diestro y siniestro. No obstante, debemos valorar el coste real de esta alimentación suplementaria y si esta inversión se va a traducir en un adecuado rendimiento de la producción de nuestro cazadero. Para ello es importante conocer las necesidades de los animales, pues con frecuencia la alimentación de los cochinos se lleva a cabo sin un control real de sus necesidades específicas, sin considerar el momento o época del año en que se realiza o sin tener en cuenta si se trata de adultos o de jóvenes. Incluso se emplea el mismo producto, siempre a base de maíz o cereal. Si logramos llevar a cabo esta gestión alimenticia de forma correcta y equilibrada el resultado serán poblaciones mejores y más sanas y más calidad del medio en el que se desarrollan.

En el caso en el que se produjese una deficiencia estacional en la alimentación debemos incidir aún más en administrar todos los nutrientes esenciales para conseguir un adecuado equilibrio nutricional de los animales a base de un pienso complementario equilibrado. Comenzando por los más pequeños, los rayones, cabe recordar que la alimentación del jabalí en sus primeros meses de vida es el seguro para un fructífero resultado final. La escasez de alimentos deriva generalmente en un desequilibrio en la nutrición, que a estas edades acarrea importantes obstáculos para su desarrollo, amén de unas cifras de mortandad muy elevadas.

Invierte en los jabatos 

Si queremos aumentar la densidad de esta especie habrá que incidir en que lo fundamental es que la descendencia sea lo más prolífica posible y logre alcanzar la edad adulta. En otras palabras, si realizamos un aporte de alimentación equilibrado destinado a los jabatos conseguiremos aumentar el número de ejemplares sanos y con el mayor desarrollo morfológico a edades más tempranas. Si a todo esto le añadimos que la hembra o madre lactante cuenta con una alimentación o aporte equilibrado, estaremos garantizando una correcta y adecuada lactancia de los pequeños jabalíes.
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¿Pienso equilibrado o maíz? 

El maíz es un cereal rico en calorías, pero muy pobre en fibra y minerales. Resulta muy apetecible para los jabalíes, pero su nivel de proteínas es bajo y el valor biológico de éstas demasiado escaso para atender las necesidades fundamentales de estos animales. Con ello no pretendemos decir que sea perjudicial, sino que como dieta básica, y en poblaciones estables, presenta unas importantes carencias que no se suelen tener en cuenta. Para aprovechar plenamente el valor productivo de este cereal, estas deficiencias han de contrarrestarse mediante un apropiado suplemento. Los criterios para la elección de un tipo u otro de alimentación deben ser tanto productivos como económicos, no sea que por querer ahorrar un poco nos estemos cargando la calidad de nuestra población. 60340Si para un jabalí macho adulto el maíz puede ser, en algunos casos, un ingrediente complementario, para uno joven puede llegar a ser enormemente perjudicial. Del mismo modo, es habitual que una cochina adulta alimentada a base de este cereal saque adelante una o dos crías al año, por lo que en cinco años podremos obtener un rendimiento de entre cinco y diez rayones. Si a este mismo animal le proporcionamos una alimentación adecuada y equilibrada podría asegurarnos entre cuatro y seis rayones por temporada, lo que se traduce en una cifra de entre 20 y 30 crías en cinco años. Con este abrumante resultado, el ahorro producido por el maíz no parece tan ventajoso.

¿Qué les doy de comer?

Podemos apuntar un dato a modo de ejemplo: un jabalí adulto necesita alrededor de un 15% de proteínas en su alimentación diaria. Si el maíz tan sólo le aporta un 9%, estaremos muy por debajo del requerimiento del animal. Del mismo modo, el exceso de materia grasa y almidón provocará un excesivo engrasamiento de nuestro cochino. Para equilibrar esta ración necesitaríamos multiplicar por unidad de maíz, teniendo que aportar más cantidad. Entonces, ¿dónde estaría el ahorro? En algunos casos, se les administra el grano mezclado con cebada o trigo para aminorar el efecto de este engrasamiento, pero este aporte no cumple los requisitos mínimos del resto de elementos esenciales.
No debe caer en el olvido un importante factor como el nivel de digestibilidad de los alimentos. En los cereales se considera que la media es del 40%, mientras que en el pienso molido alcanza un valor del 60%. Este índice crece hasta casi el 80% si lo granulamos. Tan importante incremento es debido a que se produce una rotura de los enlaces del almidón por hidrólisis, de modo que además se obtiene una mayor equilibrio de las raciones, mejor homogeneidad de las mezclas, mayor durabilidad, menos enranciamientos….
El presente de nuestras explotaciones es muy importante, pero lo es mucho más su futuro, que guardará una relación directamente proporcional al cuidado que concedamos ahora a nuestros queridos rayones. Es indudable que el esfuerzo que se realiza en algunos de nuestros cotos es y será uno de los grandes pilares para alcanzar grandes éxitos en dicha gestión, que además será lo que finalmente prevalezca. Por eso, se hace necesario optimizar estos esfuerzos y, a buen seguro, una manera de hacerlo será esmerándose en la alimentación.
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Maíz vs pienso equilibrado

La proteína bruta es necesaria para el crecimiento adecuado de los cochinos, desde su nacimiento hasta su completo desarrollo, y en niveles convenientes ayudará a alcanzar el desarrollo total del animal en menos tiempo. Vemos que en el caso del maíz este elemento es absolutamente insuficiente, y que un pienso equilibrado llega a aportar cantidades ostensiblemente más elevadas. Además, este cereal es deficitario de lisina, que es un aminoácido de vital importancia, sobre todo, para el óptimo desarrollo de los rayones.008-OBJETIVO-ANIMAL
También el contenido en materia grasa es fundamental para aumentar la productividad de animales/año y asegurar el crecimiento de los colmillos en machos adultos. El maíz tiene un porcentaje elevado de esta materia –tendencia que se corrige en el caso de un pienso compuesto completo–, lo que conduce a un resultado poco deseable: ejemplares con altos índices de grasa, crecimientos desequilibrados, trastornos en la reproducción, formaciones óseas desiguales, disminución de la prolifícidad y problemas en la lactación.Jabalí_5172
El almidón, por otro lado, es necesario para favorecer el crecimiento y desarrollo corporal; en exceso es muy perjudicial para estos animales. Los estudios realizados recomiendan un porcentaje en torno al 40% de la dieta, cifra que el maíz sobrepasa.
El maíz es deficitario también en materia mineral y vitaminas, trascendentales para el desarrollo de los órganos: fortalecen el sistema óseo, vigorizan el crecimiento del pelo, aceleran y refuerzan el crecimiento del colmillo… En los jabalíes, sobre todo cuando atraviesan la etapa de rayones, la presencia de determinados aminoácidos esenciales es de vital importancia: los podemos encontrar en un pienso completo.